10 razones para preservar la Feria del Santo #LaFeriaNoSeToca

 


 

Desde el Excelentísimo Ayuntamiento de Montilla han tenido la magnífica idea de dividir la fiesta más importante del pueblo montillano, salvando el Viernes Santo. En un alarde de genialidad, se ha decidido que, como en julio hace calor, mejor trasladamos los días de festejos importantes a la Feria de la Vendimia, en septiembre. El proyecto consiste en trasladar la feria de día a la zona centro y situar el ocio nocturno en el recinto de Envidarte. Me parece apropiado el término “ocio nocturno”, ya que es singular, como la “única caseta” que plantea el Ayuntamiento para dicha actividad.  


El consistorio piensa que, estas medidas aumentarán la asistencia al festejo, favorecerán a la hostelería y potenciarán la Feria de la Vendimia. No sé si la falta de lógica viene dada por un golpe de calor que habría sufrido nuestro primer edil en la última feria porque, "con la calor no puede haber feria", o por una mayoría absoluta que ha acomodado al alcalde en su torre de marfil. En cualquier caso, no podemos ser meros espectadores contemplando como nos arrebatan el poco ocio que queda en nuestra ciudad, y la mejor forma de expresar nuestra disconformidad es con argumentos.  

 

  1. 1. La tradición. 

La Feria del Santo ha sido históricamente el festejo más importante de nuestra ciudad, en honor a nuestro patrón, San Francisco Solano. Nuestra fiesta popular ha conseguido ser un gran reclamo para personas de localidades cercanas y no tan cercanas, situando en muchos casos a Montilla en el mapa por la calidad y el ambiente que desprende la Feria del Santo. El simple hecho de quitarle relevancia es perder uno de los mayores atractivos de Montilla, en especial para los jóvenes. 

 

  1. 2. Ferias diferentes, distintas finalidades.  

No debemos comparar la Feria de la Vendimia con la Feria del Santo, no son, ni pretenden ser lo mismo. La función de la Fiesta de la Vendimia es fundamental para difundir la denominación de origen Montilla-Moriles, potenciar nuestros vinos y darlos a conocer atrayendo gente influyente a nuestro municipio. No necesita de grandes casetas ni conciertos porque esa no es su finalidad, y, en caso de querer potenciarla de esta forma, no se entiende por qué debe ser en detrimento de la feria de julio. La Feria del Santo por su parte, es un lugar donde toda la ciudadanía coincidimos y podemos acceder al ocio que queremos. No importa si eres un chico de 18 años que quiere divertirse tomando algo o una familia que quiere pasar el rato con sus hijos en los coches locos, en la Feria del Santo encajamos todos.   

 

  1. 3. “Fomentar la Feria de la Vendimia”. 

Creo que el argumento sería “si nos cargamos la Feria del Santo, la de la Vendimia parecerá mejor”. Imponer los días importantes de festejos en septiembre coincide con el mes en el que Montilla genera más empleo, coincidiendo con la vendimia y la pasera. Es la peor fecha para que las personas que se dedican al vino, que no son pocas, puedan disfrutar de los festejos. 

 

  1. 4. Los jóvenes, los históricos grandes olvidados. 

 No paro de escuchar a los políticos, que se llenan la boca con la palabra juventud, pero no tardan en dejarnos tirados. Habrán pensado en el Ayuntamiento que, en septiembre, cuando los estudiantes montillanos y de localidades cercanas nos hemos trasladado fuera de la ciudad, es el mejor momento para que asistamos a los festejos populares. 

 

  1. 5. Las Ferias y los feriantes. 

Priego y Cabra celebran los festejos más importantes de sus localidades en la misma fecha en la que se celebra la Feria de la Vendimia. Además de ser “competencia” en cuanto a la asistencia de personas, habrá que preguntarles a los feriantes si prefieren montar sus puestos en las fiestas importantes de estas ciudades o en una feria tradicionalmente menor.  

 

  1. 6. Matar a la Feria para dejar espacio a las verbenas.  

Resulta que dividir lo que era una gran Feria en pequeñas verbenas de barrio es la solución para atraer a más personas a los festejos. Yo creía que lo que nos gustaba de la Feria es ver a toda la ciudadanía pasando un buen rato en un mismo ambiente, encontrarte con conocidos, amigos y familiares para compartir una copa de vino con ellos. Parece ser que no, que dividirnos en cuantos bares hay en Montilla, como cualquier fin de semana, es la nueva tendencia como reclamo para la población. Es tan buena idea que pretenden hacerlo en ambas Ferias.  

 

  1. 7. “Fomentar la hostelería y el comercio del centro durante la Feria del Santo”. 

Normalmente los comercios aprovechan los días festivos de Feria para cogerse vacaciones, por lo que veo difícil fomentar comercios con persianas bajadas. En cuanto a la hostelería del centro, al igual que el comercio, no se arregla con cuatro días de afluencia, sino que se trata de un problema que necesita de medidas a largo plazo. Por otra parte, se debe fomentar que la hostelería monte sus propias casetas para así hacer negocio en el recinto ferial, favoreciendo la afluencia de personas a éste.  

 

  1. 8. El ruido y los vecinos, los vecinos y el ruido. 

Teniendo en cuenta que es poco plausible que las personas que ni entrábamos en cuatro casetas de noche formando largas colas, entremos en “una única caseta”; es lógico pensar que muchas personas se quedarán en los bares céntricos y que después del cierre, se puedan formar botellones en pleno centro. Esta situación causaría ruidos innecesarios que molestarían a los vecinos, por no hablar del deterioro del mobiliario urbano, no preparado para estas situaciones como sí lo estaba la Feria.  

 

  1. 9. 2022, el peor momento. 

En dos años de pandemia no hemos podido disfrutar los festejos más importantes de nuestra ciudad. Los montillanos anhelamos los tiempos en los que salíamos a la calle para compartir momentos con nuestros vecinos. A falta de cuatro meses, cuando ya muchos habían planeado sus vacaciones en relación al festejo, nos arrebatan la ilusión de volver a vivir la Feria del Santo como antes, pero con más ganas que nunca. 

Dentro del contexto político encontramos a un Rafael Llamas con mayoría absoluta, pero a la espera de repetir resultados ante las urnas en 2023. Me resultaría muy extraño que el pueblo montillano no penalizara tal depreciación de nuestra Feria del Santo. Otra opción es que ni si quera intente renovar mandato y subirse al barco de Juan Espadas en las elecciones andaluzas. Flaco favor le haría entonces a su posible sucesor. 

 

  1. 10. La falta de consenso. 

Se habla de reuniones con “representantes de diferentes colectivos”, pero nadie confirma que se le haya pedido opinión. El Partido Popular, principal partido de la oposición afirma que se ha enterado por la prensa y se posiciona totalmente en contra de la propuesta; Izquierda Unida califica de “precipitada” la medida, a falta de estudiar el caso con detenimiento, pero trasladando que en ningún caso sería una buena decisión para la Feria de este año; y Ciudadanos “no ve viable la propuesta, salvo en caso de petición unánime”. En cualquier caso, todos coinciden en que el PSOE no ha contado con ninguno de ellos para plantear la propuesta. 

 

Es el momento de que los ciudadanos opinemos, que se note nuestro desacuerdo para que las instituciones rectifiquen y no lleven a cabo este proyecto. No se trata de partidos ni ideologías políticas, se trata de salvar la Feria del Santo tal y como la conocemos. Es hora de difundir el contenido por las redes con el #LaFeriaNoSeToca y unir fuerzas firmando en el siguiente link de change.org Preservar la Feria del Santo change.org.


La reflexión de Francisco S. Cobos

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